Y, como veis a continuación, esto ha dado sus frutos. La manta ha tomado forma, ha crecido y está casi lista.
Me ha quedado un poco estrecha. Así que la haré un poco menos larga de lo necesario y la terminaré con unas vueltas alrededor.
El objetivo inicial de reducir mi stock de lanas se ha cumplido y el resultado me gusta. Además, lo que es más importante, le gusta a mi hija, que ya se la ha agenciado para su cama.
Me queda el trabajo más pesado para mí: rematar todas las lanas. Siempre lo dejo para el final...
Esta preciosa seguro cuando la remates y le pongas lo del alrededor quedara de lujo ybasi quitas restos de lanas que se van guardando y es la única forma de gastar es hacer mantas que puedes meter varios colores
ResponderEliminarBesos
Yo me he decidido empezar una "little Wollie" y estoy escondiendo los hilos en la siguiente vuelta para no tener que rematar. Lo hago como en los bolsos wayuu, tejiendo el punto alrededor de la hebra a esconder. La verdad que ahorra mucho tiempo, jajaja
ResponderEliminarpor cierto bonita combinación de colores
Es muy bonita!! Normal que tu hija ya se la haya pedido para su cama!!!!!
ResponderEliminarBesos.
Menudo trabajo, a disfrutarlo mucho.
ResponderEliminarBesos